Día de descanso en Namche

Ayer teníamos pensado pasar una sola noche en Namche y caminar hoy dos horas a Khumjung.

En la mañana, durante el desayuno, nos pusimos de acuerdo para pasar una noche más aquí y al día siguiente caminar directo hasta Tengboche.

Estos días de descanso no me gusta pasarlos sentado todo el tiempo. Después del desayuno, y de un regaderazo rápido, estuve caminando por los callejones de Namche. En las tiendas se puede encontrar todo tipo de ropa para el frío (la mayoría copias piratas de China), equipo de escalar, medicinas, artesanías, tapetes tibetanos, etc.

A Namche también le llaman Namche Bazar porque en este lugar coinciden las caravanas que vienen con productos de Tibet y los porteadores que traen la mercancía desde Lukla. Es aquí donde llegan de varios pueblos del Khumbu para abastecerse en el mercado que se pone dos veces por semana.

Para la comida, Nyima me invitó a su casa a probar el plato típico de la región: una tortilla hecha de papa a la que le ponen encima mantequilla, crema con especias y salsa picante. Normalmente se come con la mano.

Después, caminé hasta el monasterio del pueblo. Es uno de los más viejos del valle y tiene una escultura de Guru Rimpoche de más de trescientos años. Uno de los monjes me regaló una bandera de Tibet para llevar hasta la cumbre.

En la tarde me la pasaré leyendo porque tengo muy abandonado a mi libro.

Este es un típico día de descanso y cae muy bien antes del ascenso a Tengboche y Pheriche.