Cuatro meses después, un nuevo proyecto: el Camino de Santiago.

A mediados de Noviembre del año pasado partí hacia Nepal con mi bicicleta para realizar un recorrido desde la frontera con China y hasta la frontera con India. Estaba en un proceso de recuperación física después de los fuertes problemas de salud que tuve durante el intento de circunnavegación, tratando de recuperar mi confianza. Pero también intentaba cumplir una promesa que me había hecho meses antes cuando escalaba en los Himalaya: si lograba el doble ascenso al Everest, iría a visitar el lugar de nacimiento del Buda Shakiamuni en Lumbini, Nepal.

Carreteras de Nepal
Comencé el recorrido en Kodari, justo en la frontera con China y rodé hasta Katmandú. Luego continué hacia el Oeste donde encontré un pueblo mágico en las montañas llamado Bandipur. En Pokhara pasé unos días realizando vuelos en parapente y me dirigí hacia el sur hasta llegar a Lumbini. Me dio gran satisfacción visitar por fin este conjunto de templos budistas de todo el mundo, que rodean un pequeño lago con una isla al centro y donde está el templo de Nanda Devi que marca el punto exacto que la tradición reconoce como el lugar de nacimiento del Buda. Cumplí mi promesa.


La bici con la que hice el recorrido en Nepal
Regresé a México con mi confianza renovada y durante casi cuatro meses me preparé para el Ironman Los Cabos el 30 de Marzo de este año. Es un triatlón que consiste en nadar 3.8 km, recorrer 180km en bicicleta, y correr 42km. Todo en el mismo día. Participé en esta prueba también en 2013 y, aunque al terminar en aquella ocasión me dije que nunca más lo volvería a hacer, me inscribí de nuevo y comencé a entrenar. Mi rutina se volvió de 3-4 horas de entrenamiento diario entre semana (además de mi trabajo, por supuesto), con entrenamientos mucho más largos en los fines de semana. El Ironman se volvió un estilo de vida.

Ironman Los Cabos
Los días previos al Ironman Los Cabos sentí el nerviosismo normal de antes de estos eventos, pero también me sentía con mucha más confianza que el año anterior. El 30 de Marzo comenzó la prueba con un arranque masivo en la playa Palmilla a las 7:00am, con cerca de 1,100 atletas participando. Logré nadar en 8 minutos menos que el año anterior. El recorrido en bicicleta fue de tres vueltas de 60km sobre la Carretera Transpeninsular entre San José del Cabo y Cabo San Lucas. Mucho sol, mucho calor, bastantes subidas, pero afortunadamente poco viento. Aquí bajé otros 6 minutos. Finalmente, la parte de correr fue de tres vueltas de 14km a lo largo de San José. El apoyo de los voluntarios y de la gente que salió a animarnos hizo toda la diferencia. Terminé después del atardecer y crucé la meta 25 minutos más rápido que el año pasado. Al cruzar la meta, escuché que en los altavoces dijeron: “David Liaño, ¡eres un Ironman!”. Hacen esto con todos los competidores, desde el primer lugar hasta el último que cruza la meta. 

Meta

La siguiente aventura la tengo pendiente desde hace ya muchos años e iniciará en poco tiempo: recorrer a pie el Camino de Santiago en España. Este es el nombre genérico de varias rutas de peregrinos que inician en diferentes países de Europa pero terminan en Santiago de Compostela, en Galicia. Yo estaré siguiendo el Camino Francés que comienza en St. Jean Pied de Port en Francia y que mide aproximadamente 800km (de ser posible, me gustaría continuar caminando hasta Finisterre). Es común que la gente se tome cinco o seis semanas en completar este recorrido pero yo tengo planeado hacerlo en poco menos de dos semanas, caminando en promedio 50km por día. Sobra decir que no lo haré por motivos religiosos (no sigo ninguna religión). La gente que hace esta travesía por lo general trata de darle un toque místico y espiritual. Esa parte no me interesa. Simplemente lo hago por vivir una experiencia personal y por el placer de caminar cientos de kilómetros. No necesito otra razón.