Viviendo en el campamento base norte
Estos días en el campamento base nuestra prioridad es aclimatarnos a la
altura y hacer que nuestros cuerpos comiencen a producir una mayor cantidad
de glóbulos rojos. Para esto, hay que combinar el descanso con ejercicio
ligero. Este es mi día de ayer en el campamento base norte:
Aunque el sol alcanza nuestras tiendas de campaña hasta las 7:15am, estaba
despierto media hora antes. Esta vez me despertó el sonido de las campanas
de los yaks que vinieron a llevarse parte del equipo destinado para el
campamento base avanzado. Normalmente desayunamos a las ocho en punto pero
en cuanto pega el sol en la tienda de campaña me levanto al baño. Nuestro
campamento está justo en la entrada del valle, junto a un mirador a donde
llegan los turistas y toman fotografías del Everest. Nuestro "baño" es una
piedra justo en la base del mirador. A veces los turistas nos retratan y
otras veces nosotros los retratamos a ellos.
El desayuno es en la carpa comedor y por lo general siempre como huevos
para compensar las proteínas que dejo de comer por ser vegetariano.
Terminando, tom O mi cámara, ipod , libro y algo de agua y camino cerca de
ocho kilómetros hacia abajo del valle hasta el monasterio de Rongbuk.
Cualquiera que haya leído sobre las expediciones inglesas de los años
1920's reconocerá el nombre de este famoso monasterio.
Tardé cerca de dos horas en llegar hasta el monasterio. Entrando, un monje
bastante joven quería que pagara un boleto para entrar. El gobierno de China
hace que se cobre la entrada como un tipo de impuesto. Me dirigí a un monje
mayor y que hablaba inglés y le dije que no era un turista y que simplemente
iba a prender unas veladoras de mantequilla como ofrenda. Me llevó hasta el
altar principal y encendí mi ofrenda.
Terminando agradecí al monje y reanudé la marcha de vuelta al campamento
base. Sin embargo, a la mitad del camino me detuve en lo que llaman Hotel
California, que no es más que varias docenas de carpas con restaurantes y
"hoteles" donde reciben a los turistas que vienen por un rato o una noche.
Por la noche, los restaurantes se convierten en hoteles y quien duerme ahí
recibe una cobija y una almohada y duerme sobre el colchón que sirvió de
sillón en el restaurante. Comí un chowmein y unas papas fritas y terminando,
leí mi libro de Haruki Murakami durante casi una hora. Volví a emprender el
camino de vuelta al campamento base y llegué a media tarde.
Antes de la cena, escribí para el blog, leí un poco más y resolví varias
veces mi cubo de Rubik. Ya cerca de las nueve de la noche, y después de
haber cenado, regresé a mi tienda de campaña donde me dormí escuchando
música clásica
_____
Mañana partiremos a dormir al campamento intermedio. Llevamos dos días de
retraso y los tendré que compensar quitando otros tantos de descanso. La
próxima vez que escriba será desde el campamento base avanzado.
altura y hacer que nuestros cuerpos comiencen a producir una mayor cantidad
de glóbulos rojos. Para esto, hay que combinar el descanso con ejercicio
ligero. Este es mi día de ayer en el campamento base norte:
Aunque el sol alcanza nuestras tiendas de campaña hasta las 7:15am, estaba
despierto media hora antes. Esta vez me despertó el sonido de las campanas
de los yaks que vinieron a llevarse parte del equipo destinado para el
campamento base avanzado. Normalmente desayunamos a las ocho en punto pero
en cuanto pega el sol en la tienda de campaña me levanto al baño. Nuestro
campamento está justo en la entrada del valle, junto a un mirador a donde
llegan los turistas y toman fotografías del Everest. Nuestro "baño" es una
piedra justo en la base del mirador. A veces los turistas nos retratan y
otras veces nosotros los retratamos a ellos.
El desayuno es en la carpa comedor y por lo general siempre como huevos
para compensar las proteínas que dejo de comer por ser vegetariano.
Terminando, tom O mi cámara, ipod , libro y algo de agua y camino cerca de
ocho kilómetros hacia abajo del valle hasta el monasterio de Rongbuk.
Cualquiera que haya leído sobre las expediciones inglesas de los años
1920's reconocerá el nombre de este famoso monasterio.
Tardé cerca de dos horas en llegar hasta el monasterio. Entrando, un monje
bastante joven quería que pagara un boleto para entrar. El gobierno de China
hace que se cobre la entrada como un tipo de impuesto. Me dirigí a un monje
mayor y que hablaba inglés y le dije que no era un turista y que simplemente
iba a prender unas veladoras de mantequilla como ofrenda. Me llevó hasta el
altar principal y encendí mi ofrenda.
Terminando agradecí al monje y reanudé la marcha de vuelta al campamento
base. Sin embargo, a la mitad del camino me detuve en lo que llaman Hotel
California, que no es más que varias docenas de carpas con restaurantes y
"hoteles" donde reciben a los turistas que vienen por un rato o una noche.
Por la noche, los restaurantes se convierten en hoteles y quien duerme ahí
recibe una cobija y una almohada y duerme sobre el colchón que sirvió de
sillón en el restaurante. Comí un chowmein y unas papas fritas y terminando,
leí mi libro de Haruki Murakami durante casi una hora. Volví a emprender el
camino de vuelta al campamento base y llegué a media tarde.
Antes de la cena, escribí para el blog, leí un poco más y resolví varias
veces mi cubo de Rubik. Ya cerca de las nueve de la noche, y después de
haber cenado, regresé a mi tienda de campaña donde me dormí escuchando
música clásica
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Mañana partiremos a dormir al campamento intermedio. Llevamos dos días de
retraso y los tendré que compensar quitando otros tantos de descanso. La
próxima vez que escriba será desde el campamento base avanzado.